Te vas lejos de casa, a estudiar lo que desde pequeño (o no tan pequeño) querías ser. Estás buscando cumplir tu sueño. Pero, te encuentras con un problema de muchos chicos y chicas de tu edad, no sabes dónde vas a vivir: si en un piso compartido, una residencia o un colegio mayor. Te decantas por una residencia, pero te preguntas, ¿qué tipo de residencia?.
Una gran residencia de estudiantes o una residencia de estudiantes pequeña y familiar.
Tengo que comentarte antes que, cada una tiene sus ventajas y sus desventajas, por lo tanto, te aconsejo que cojas un papel y un bolígrafo para barajar estos pros y estos contras, y ver que es lo que es transcendental para ti. Es una decisión importante, es por eso que te invito a dejar algún comentario de cualquier duda que tengas al respecto.
Una gran residencia.
Imagínate la diferencia entre un hostal o un hotel pequeño, y un hotel grande. Pues es exactamente lo mismo que en las residencias de estudiantes. La diferenciación se encuentra en los servicios, en el trato personal y en la sensación que produce. Es decir, en el caso de los servicios, vas a tener una cantidad elevada que escoger, como un gimnasio, una piscina, una gran sala de estudios, lavabos privados, una biblioteca, etcétera. En el caso del trato personal, una gran residencia se caracteriza por la impersonalidad, es decir, como sois más estudiantes, es difícil ofrecer un trato personal al cliente. Y, por último, vas a tener la sensación que estás viviendo en un hotel.
Una residencia de estudiantes pequeña y familiar.
A muchos de nosotros, no nos gusta las cosas impersonales y los sitios ostentosos, por lo tanto, este tipo de residencia te encaja. De hecho, es el tipo de residencia que somos nosotros, la Barcelona Housing Student. En una pequeña residencia de estudiantes, vas a tener esta intimidad que buscas y vas a tener un trato bastante más personalizado. Al ser pocos estudiantes que vivís, os conoceréis los unos y los otros, y haréis amistades; que siempre se agradece al estar solo en una ciudad tan grande como es Barcelona.
Aunque no tengamos tantos servicios como en una residencia grande, hay alternativas, por ejemplo, en el caso del gimnasio, puedes ir a los que están ubicados en el barrio de Gracia, y conocer más gente aún.
Ninguna residencia es mejor o peor.
Con esto quiero decir que, no existen residencias peores o mejores, ya que va a gusto del estudiante. Obviamente no todos se pueden permitir una residencia grande, ya que es más cara; pero quiero decirte que estar en una residencia pequeña no es malo. Imagínate un piso compartido, pues es más o menos el mismo concepto.